El Banco Mundial emitió un informe con perspectivas económicas favorables para el Perú en 2024. Según el informe, la economía peruana se aceleraría y experimentaría un crecimiento del 2.3%, un aumento significativo en comparación con el 0.8% previsto para 2023. Esto no solo representa una recuperación económica, sino que también coloca a Perú por encima de sus vecinos Chile y Colombia en términos de crecimiento económico proyectado.
Crecimiento regional y desafíos
El informe del Banco Mundial también proporciona una visión general de las perspectivas económicas en América del Sur. Se espera que Paraguay lidere el crecimiento con un sólido 4.0%, seguido de Uruguay (3.3%) y Argentina (2.8%). Sin embargo, Perú se ubica de manera respetable en la cuarta posición con un crecimiento estimado del 2.3%, superando a Colombia (2.1%) y Chile (1.8%).
A pesar de estas proyecciones positivas, el informe subraya que la región aún enfrenta desafíos significativos. Se espera que el Producto Interno Bruto (PIB) regional crezca solo un 2.0% en 2023, ligeramente por encima de las proyecciones anteriores del 1.4%. A pesar de este crecimiento, América del Sur sigue rezagada en comparación con otras regiones del mundo.
Algunos desafíos y soluciones
El vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, Carlos Felipe Jaramillo, destacó que aunque la región ha demostrado resistencia a los shocks externos posteriores a la pandemia, el crecimiento económico sigue siendo «anémico». Para abordar este problema, Jaramillo enfatizó la necesidad de impulsar la inclusión y el crecimiento, mejorar la gobernanza y generar consenso social.
Señaló que las soluciones digitales pueden desempeñar un papel fundamental en este proceso, al complementar las reformas estructurales y aumentar la productividad. Estas soluciones pueden mejorar la prestación de servicios, respaldar la eficiencia gubernamental y contribuir a un crecimiento económico más sólido.
Los factores Externos y las políticas monetaria
El informe también destaca factores externos que afectan la región, como la demora en el control de la inflación en el Grupo de los Siete (G7) y la desaceleración del crecimiento en China. A pesar de estos desafíos, se espera que la inflación regional retroceda, y varios países, incluidos Brasil y Chile, han comenzado a recortar las tasas de interés.
Se resalta que la inflación regional se encuentra en un nivel relativamente bajo en comparación con otras regiones, y se espera que se cumplan las metas de los bancos centrales para 2024. La lucha exitosa contra la inflación refleja factores externos, como la disminución de los precios de los alimentos y los combustibles.