Conrad San Román Flores, un arquitecto de 37 años, tiene una pasión: la madera. Desde sus primeros días en la carrera de Arquitectura, Conrad se sintió atraído por este material vivo, sostenible e inagotable, tal cual como él lo describe.
En 2020, en plena pandemia de COVID-19, Conrad decidió convertir su pasión en un negocio. Así nació Wisnu, una empresa que diseña y fabrica bicicletas y paisajes topográficos en madera.
Lo que comenzó como un pasatiempo para este arquitecto, con la creación de cofres, porta vasos y aretes de madera, pronto evolucionó cuando descubrió la fabricación digital y la impresión en 3D. La adquisición de una máquina de CNC, por un monto de 1,000 soles, marcó un inicio en su emprendimiento, ya que, gracias a su experiencia en el manejo de programas de diseños en la universidad, la fabricación digital se volvió accesible.
Con el deseo de tener su propia minifábrica y fabricar sus diseños, Conrad se adentró más en el mundo de la madera. Desde esculturas topográficas del territorio peruano hasta el desafío de crear una bicicleta de madera, su interés no hizo más que crecer. Para llevar a cabo este ambicioso proyecto, Conrad y su hermano Carlos se unieron al CITE madera, un centro de innovación del Ministerio de Producción (Produce), buscando asesoramiento y apoyo para desarrollar la bicicleta.
La primera bicicleta
El primer prototipo de la bicicleta presentó desafíos, especialmente en las dimensiones, resultando en una versión inicial que necesitaba algunos cambios. Tras ajustar las medidas y realizar pruebas de resistencia, el segundo prototipo superó todas las pruebas. La colaboración con su hermano, ingeniero industrial, fue esencial, aportando conocimientos mecánicos y mano de obra.
Con el respaldo del CITE madera, realizaron pruebas en el laboratorio y superaron las dificultades iniciales. Sin embargo, Conrad reconoce que la principal dificultad en el sector de las bicicletas es la difusión y la educación del consumidor peruano. «Una de las dificultades que tenemos es la difusión, pero la difusión para educar al consumido peruano», relata Conrad a Infomercado.
El crecimiento continuó con la adquisición de una CNC mediana por S/10 mil, permitiéndoles fabricar bicicletas de manera más eficiente. Aunque el proyecto de bicicletas tiene solo un año en el mercado y han vendido 10 unidades hasta el momento, Conrad destaca la rentabilidad y consolidación de Wisnu en las esculturas.
«La máquina computarizada que tenemos nos permite fabricar cualquier diseño que el cliente quiera. Por eso, ofrecemos una variedad de productos. Como diseñadores, tenemos la libertad de crear cualquier cosa que se nos ocurra. Por eso, uno de nuestros proyectos actuales es hacer una bicicleta eléctrica«
Conrad San Roman, fundador de Winsu Perú
Actualmente, los hermanos San Roman Flores usan maderas ecoamigables, como el pumaquiro de la selva peruana y la madera contrachapada certificada como FSC, es decir, de manejo forestal sostenible.
Proyecto en expansión
Desde 2020 hasta la fecha, Wisnu ha logrado ventas por 200 mil soles, impulsadas principalmente por las esculturas, mientras que las bicicletas están ganando terreno en el mercado.
Asimismo, dentro de los productos de madera más destacados se encuentra el mapa del Perú, el Parque Nacional del Huascarán, el Cañón del Colca y los muros incaicos tallados en 3D.
Aunque enfrentan desafíos, los hermanos San Roman Flores y su equipo están decididos a seguir creciendo y educando al público sobre la sostenibilidad y la belleza de sus productos de madera. Además, esperan que muy pronto sus obras de arte se puedan vender al extranjero.
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