El pleno del Congreso aprobó eliminar el voto de confianza, medida que requerían los gabinetes ministeriales para mantenerse en funciones. Con 75 votos a favor se aprobó modificar el artículo 130 de la Constitución, por medio del cual el parlamento daba el visto bueno a los ministros de Estado.
“Dentro de los treinta días de haber asumido sus funciones, el Presidente del Consejo concurre al Congreso, en compañía de los demás ministros, para exponer y debatir la política general del gobierno y las principales medidas que requiere su gestión. Esta exposición no da lugar a voto de confianza alguno”, precisa la reforma.
La modificación plantea mantener la función del ejecutivo de plantear las cuestiones de confianza que considere necesarias, la cual está comprendida en los artículos 132 y 133 de la Carta Magna. De esta manera, no se quita la posibilidad al Ejecutivo de cerrar el Congreso ante la negación de dos cuestiones de confianza consecutivos.
Dado que no se alcanzó los dos tercios requeridos, la modificación constitucional tendrá que pasar por consulta popular (referéndum). Cabe resaltar, que las reformas constitucionales deben ser aprobadas por 87 votos en dos legislaturas o 66 votos más referéndum.