Víctor Loyola Desposorio, titular de la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil), renunció a su cargo tras una denuncia pública en la noche del domingo, por el dominical Cuarto poder.
Esta situación llevó a que el ministro de Trabajo, Alfonso Adrianzén, le exigiera su renuncia, y Loyola renuncie ayer lunes 6 de marzo.
Es irónico que el encargado que el titular de entidad estatal que se encarga de velar por el cumplimiento de los derechos laborales, se le acuse de hostigamiento y acoso sexual por una empleada.
Acusaciones contra el exjefe de la Sunafil
En el reportaje se pudo ver que la denunciante, quien se identificó como Maritza, afirmó que en setiembre de 2022, Loyola le cogió fuertemente la cara y la besó a la fuerza en la sede del ministerio. También agregó que en otra ocasión la persiguió hasta el baño.
“Él me dice que quería estar conmigo, porque yo le gustaba. Que quería que sea su enamorada. Yo le recalco que es una persona casada y él me dice, ‘no, yo no soy casado, pero nadie se tiene que enterar. Aparte, yo no te voy a restar en tu vida, yo soy el superintendente de la Sunafil, yo te voy a sumar’», sostuvo la denunciante.
Víctor Loyola
Loyola Desposorio fue nombrado como jefe de la Sunafil en junio de 2022. Y, presuntamente, desde el primer momento comenzó sus hostigaciones en el el quinto piso de la sede del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE).
Asimismo, el exjefe de Sunafil se pronunció ante tal graves acusaciones. “En virtud del pedido realizado, pongo mi cargo a disposición con el único afán de continuar sometiéndome a las investigaciones, ante las cuales me defenderé y, posteriormente, realizaré las acciones legales contra las personas que pretenden manchar el honor de mi persona, mi familia y de la institución”, indicó.