La pandemia de la COVID-19 ha tomado a todos por sorpresa. Desde que se decretó el Estado de Emergencia en el país, el 16 de marzo, varios negocios, emprendimientos y empresas se vieron afectadas, pues tuvieron que cerrar por un tiempo indefinido.
Conforme fue pasando el tiempo, algunos sectores comenzaron a reactivarse. Sin embargo, hay otros que aún no han podido abrir sus puertas.
En el caso de las escuelas y academias de fútbol en Piura, algunas han decidido reinventarse y hacer uso de la tecnología para comunicarse con los niños; en cambio otras, han optado por esperar que la situación en el país se regularice y puedan retomar sus actividades siguiendo los protocolos de bioseguridad.
Infomercado contactó a unas de las academias de fútbol más concurridas de la ciudad y conversó con ellas sobre la situación que están viviendo a causa de la pandemia del nuevo coronavirus.
Piura Juniors
Antes de la pandemia, Piura Juniors llevaba a cabo sus actividades en las instalaciones de La Pichanga (ubicada al costado del colegio Proyecto) y, durante la época de verano, contaba con 200 alumnos inscritos. Asimismo, cinco profesores se encargaban de instruir a los niños. Ahora, con la llegada de la pandemia, el panorama ha cambiado.
«Desde que se decretó el estado de emergencia (a mediados de marzo) hasta el mes de junio, hemos estado en constante comunicación con nuestros alumnos, enviándoles material interesante sobre deportes y jugadores profesionales para que puedan distraerse un poco», comenta a Infomercado Diego Trigoso Fiol, propietario de Piura Juniors.
A pesar de la situación difícil, e incierta, que vive el país, esta academia de fútbol, con siete años de vigencia en la ciudad, decidió reinventarse y mantenerse activa.
De acuerdo con Trigoso Fiol, desde que empezó el mes de julio, los profesores Johano Bermudez y Benjamín Martínez, han programado clases vía Zoom con sus alumnos. A la fecha tienen 66 inscritos y las clases que se brindan no tienen ningún costo, todo ha sido iniciativa de la academia.
«Nosotros consideramos que no es dable cobrar porque el trabajo físico que se realiza por Zoom con un niño es muy diferente al presencial, los resultados no son los mismos. Esto lo hacemos más que todo para no perder el contacto con el alumno, para que no se estrese», puntualiza.
Del mismo modo, el propietario de Piura Juniors señala que ha pactado un acuerdo económico con los cinco profesores que laboran en la academia con el fin de brindarles apoyo durante el tiempo que no se encuentren laborando.
Respecto al local que utilizaban, el contrato de alquiler se vencía en marzo; por lo tanto, no han tenido pérdidas económicas en ese aspecto.
«Competitivamente sí nos hemos visto afectados porque no hemos podido asistir a los torneos a los que ya habíamos sido invitados, como es el caso de la copa Barcelona en Chiclayo y un torneo nacional que estaba programado para el 22 de julio en Lima. Respecto a este último, una parte ya había sido pagada y ahora estamos organizando eso», finaliza Trigoso Fiol.
Escuela Real Valladolid
Al igual que la academia Piura Juniors, la escuela Real Valladolid llevaba a cabo sus actividades en las instalaciones de La Pichanga (ubicada al costado del colegio Proyecto) y, durante la época de verano, contaba con 180 alumnos inscritos. Asimismo, cinco personas constituían su personal.
Ahora todas las actividades de esta escuela están paralizadas hasta que el Gobierno tenga listo un protocolo dirigido específicamente a las academias y escuelas de fútbol.
«Esta escuela era mi principal fuente de ingresos. A la fecha me he visto muy afectado económicamente y estoy gestionando cómo pagar las deudas que me ha dejado el alquiler del local», refiere el propietario de la Escuela Real Valladolid, Sergio Valladolid.
La escuela ha optado por no realizar clases vía Zoom u otras plataformas virtuales, pues, de acuerdo con Valladolid «no se podría mostrar un resultado y a nosotros como escuela nos interesa dar resultados óptimos a los padres de los niños».
De acuerdo con Sergio Valladolid, en octubre hay una ligera posibilidad de que las escuelas y academias vuelvan a operar. No obstante, aún deben esperar porque también habrá una preocupación por parte de los padres de los niños, ya que no todos querrán enviar a sus hijos a las academias.
Academia Flamengo
La Academia Flamengo forma parte del Club de Fútbol de la Liga de Piura, la cual tiene ya 25 años. Como academia, señala uno de los directivos, Omar Jara, tienen tres años y cuentan con cinco profesores.
Como toda academia de deportes, la mayor afluencia de alumnos está en los meses de verano (enero y febrero), debido a que los niños se encuentran en periodo de vacaciones. En esta época del año, la Academia Flamengo contaba con más de 100 alumnos, los cuales entrenaban en la cancha del colegio López Albújar.
Durante el resto del año, las clases se realizaban mayormente en la cancha del sector 7 de Santa Rosa. Sin embargo, la pandemia cambió esta situación y, a la fecha, no cuentan con ningún alumno inscrito.
Por el momento, Academia Flamengo ha optado por no realizar ninguna actividad y esperar que la situación en el país se regularice y pueda retomar sus actividades siguiendo los protocolos de bioseguridad.
«Ahora nos encontramos coordinando con la directiva cómo vamos a hacer cuando retomemos nuestras actividades de manera presencial, nada más», concluye Omar Jara.