Hace unos días, el Reino Unido prohibió TikTok en los dispositivos gubernamentales. Ahora, Nueva Zelanda se ha unido a la tendencia de quitar la aplicación de videos cortos en los dispositivos parlamentarios.
El país realiza este movimiento en medio de crecientes preocupaciones de seguridad. Más aún a causa de la recolección de datos de usuarios por parte de ByteDance, el propietario de TikTok, al gobierno chino.
Las autoridades del país citaron razones de ciberseguridad y dijeron que prohibirían la aplicación en cualquier dispositivo con acceso a la red del parlamento a finales de marzo. Sin embargo, harían una excepción para las personas necesitan la aplicación para «realizar sus deberes democráticos».
El director ejecutivo del Servicio Parlamentario, Rafael González-Montero, dijo a Reuters en un mail, que el gobierno tomó la decisión después de consultar con expertos y autoridades de otros países.
«Basándose en esta información, el Servicio ha determinado que los riesgos no son aceptables en el entorno actual del Parlamento de Nueva Zelanda», sostuvo.
TikTok expresó su desacuerdo con la decisión de bloquear su aplicación en los dispositivos administrados por el Servicio Parlamentario, ya que no fueron notificados previamente.
Además, argumentaron que la seguridad de los datos es una prioridad para la empresa. Además de no existir evidencia que demuestre que la aplicación representa un riesgo de seguridad para los usuarios neozelandeses.