La paralización de la planta compresora de Kámani del sistema de transporte de gas natural restringirá el suministro ante la reciente invasión de manifestantes que vienen desestabilizando el país; lo que pone en serio riesgo el abastecimiento de gas en las regiones del norte y sur.
«Las restricciones a la producción de GNL afecta el suministro de gas natural a las concesiones del sur oeste y del norte del Perú que se abastecen de este mismo gas natural licuefactado», informó Renato Lazo, abogado especialista en gas natural e hidrocarburos.
Lazo comentó que el Mecanismo de Racionamiento y priorización de gas natural en favor de la población (gas natural de uso residencial y vehicular) sólo protege a la población de Lima que cuenta con conexión a Camisea vía el sistema de transporte de TGP.
“La aplicación de esta medida de emergencia afecta a la población del resto del país que depende del suministro de gas natural a través del gasoducto virtual. Ello podría generar una grave afectación a las familias y actividades económicas de las regiones que conforman estas concesiones» explicó.
En ese sentido, las medidas implementadas perjudicarían en los próximos días a más de 850.000 hogares de las siete regiones que se abastecen con el gas natural vía gasoducto virtual, como Lambayeque, La Libertad, Cajamarca, Ancash, Arequipa, Tacna y Moquegua, que se estarían quedando sin gas natural al paralizarse los procesos de licuefacción.
Lazo sostuvo que el Perú no cuenta con un mínimo de seguridad energética y que el sistema, como ha sido estructurado desde un inicio, omite la realidad de nuestras concesiones generando una indebida y perjudicial discriminación en contra de los pobladores de las regiones.
Las violentas protestas y huelgas de transportistas
«Si no tenemos una rápida solución, en tres o cuatro días podemos estar enfrentando problemas de abastecimiento para las viviendas de los peruanos que viven en esas regiones del país”, advirtió el especialista.
Lazo agregó que desde fines de noviembre, las concesiones del sur oeste y del norte del país vieron dificultada su posibilidad de abastecerse por la huelga de transportes, a lo que se suma, los hechos de violencia de la última semana, que puede generar daños en las instalaciones o en los camiones que transportan el GNL.
“Se debe mantener la calma y cuidar la infraestructura del sistema de abastecimiento de gas natural en el país. Se debe apostar por la masificación del gas natural con el PL 679 y la afectación de la infraestructura sólo sería perjudicial para los más vulnerables porque significa el retraso y hasta la pérdida de oportunidades de empleo y de reducción de costos para las familias”, finalizó.