Repsol cerró el primer semestre de 2025 con un beneficio neto de 603 millones de euros, lo que representa una caída del 62.9 % en comparación con el mismo periodo del 2024.
Según informó la compañía, estos resultados fueron afectados por la baja en los precios del petróleo, la debilidad del dólar y el apagón eléctrico del 28 de abril que afectó a toda la península Ibérica.
Resultado neto ajustado cae 36.4 % en el semestre
El resultado neto ajustado, que refleja con mayor precisión el desempeño operativo de la empresa, alcanzó los €1,353 millones, lo que significa un retroceso del 36.4% frente al primer semestre de 2024.
En sus áreas, la unidad de Exploración y Producción logró un crecimiento del 3.2%, con un beneficio ajustado de €897 millones. Sin embargo, el área Industrial sufrió un descenso del 77.4 %, llegando a €230 millones, debido al apagón y a otras interrupciones eléctrica no previstas en dos instalaciones en España.
Por otro lado, el sector Clientes mostró un incremento del 14% en su beneficio ajustado, alcanzando los €358 millones.
Inversiones y deudas de Repsol
Durante la primera mitad del año, Repsol destinó €2,700 millones a inversiones brutas, principalmente para Estados Unidos, España y Brasil.
Pese a la situación, Repsol logró reducir su deuda neta hasta los €5,700 millones, es decir, €102 millones menos que al cierre del primer trimestre.
Con operaciones en Europa, Asia, África y América, Repsol mantiene su presencia global en Bolivia, Brasil, Chile, México, Perú, Venezuela, Trinidad y Tobago, EE. UU. y Canadá, reafirmando su apuesta por el crecimiento sostenible en medio de la volatilidad internacional.