Las nuevas generaciones son las más comprometidas con la ecología, la sostenibilidad y el medio ambiente.
Al menos, así detalla la compañía de investigación de mercado GlobalWebIndex, cuyo último estudio arrojó que el 61% de los millennials estarían dispuestos a pagar más por productos sostenibles.
Mientras que la generación Z y X opinó que el 58% y 55% de ellos respectivamente, estaría comprometido a incrementar sus gastos por productos más ecológicos.
Incluso un 46% de los Baby Boomers estarían a favor de elevar el presupuesto que destinan a la compra de productos ecofriendly.
Consumidor ecológico
Hoy, los consumidores jóvenes son muy conscientes del impacto que tienen sus hábitos de consumo en relación con el medio ambiente y la sostenibilidad.
“El nuevo consumidor compra aquello que necesita, mira las etiquetas de los productos, se informa por el origen y la composición, reutiliza siempre que puede y tiene especial sensibilidad por el comercio de proximidad (…)”, afirmó Magaly Pérez, Senior Account Manager de Webloyalty.
Según el portal Mercado Negro, la emergencia climática, brecha social y disrupción tecnológica, son algunos de los problemas que preocupan en gran medida a este nuevo prototipo de consumidor.
Estos son retos que también inquietan a las marcas y a sus responsables de marketing, aunque el verdadero desafió lo plantea su adaptación a las exigencias de todos estos ciudadanos y su necesidad por encontrar más productos sostenibles.
El e-commerce y su postura frente a la sostenibilidad
La compra en línea es uno de los que más favorece la sostenibilidad, pues su esencia en sí misma reduce o elimina por completo la venta física, ahorrando energía y emisiones.
Sin embargo, contribuye a la generación de residuos y contaminación, pues cada compra en e-commerce supone el envío y empaquetado de un producto.
Por ello, el sector apuesta por el desarrollo tecnológico de los servicios de última milla, que permiten geolocalizar y optimizar las rutas de los repartidores.