El último domingo se conoció que Chile propuso una «tregua» para que Perú reconozca a su aguardiente como Pisco, así lo indicó el ministro de Agricultura de país sureño, Antonio Walker.
En concreto, la propuesta chilena era que ambas bebidas tengan la denominación de origen alegando, que con ellos se ahorrarían costos en abogados en procesos en instancias internacionales.
Por su parte Rogers Valencia, ministro de Cultura, en el programa «Agenda Política» dijo: “La denominación de origen se debe a un espacio geográfico y a un proceso, además no hay que olvidar que el Pisco se realiza con una variedad de uvas pisqueras específicas”.
Además, precisó que en el pisco no se agrega azúcar como lo realiza Chile, pues se emplea solo la uva, entre otros aspectos que los hacen diferentes. «Acá estamos para enseñarles (a los chilenos) como se hace el pisco», sentenció.
Así, el ministro Rogers Valencia dijo que no es posible, dentro de la norma peruana, que el aguardiente de Chile sea considerado Pisco. “Aún si se ponen de acuerdo, no es posible”, expresó descartando el pedido de Chile.
Aclaró que en la cita de los ministros de Agricultura de ambos países, el ministro Gustavo Mostajo le aclaró a su par chileno que no era parte de su competencia aceptar su petición de que ambos países tengan la denominación de origen, pues eso lo tendría que ver tanto con el ministro de la Producción, con el Indecopi.