El Departamento de Estudios Económicos del Scotiabank estima que el Producto Bruto Interno (PBI) del país podría cerrar el primer trimestre de 2023 con un crecimiento cercano al 0% respecto al mismo periodo del año anterior.
A pesar de la recuperación económica después de las protestas de enero, los eventos climatológicos han afectado a diversas actividades, provocando una contracción en el crecimiento económico.
El primer trimestre
Ese mismo mes, enero, la actividad económica se vio afectada por las protestas sociales y el bloqueo de carreteras, especialmente en el sur del país. Como resultado, el PBI tuvo una caída del 1,1%, siendo su primera evolución negativa desde febrero de 2021, según el INEI.
En febrero se espera una mejora relativa del PBI, que se situará entre el 0% y el -0,5%, debido a la disminución de las protestas sociales y a la gradual normalización de la actividad económica.
Sin embargo, en marzo, el cierre temporal de carreteras debido a los fenómenos climáticos y la afectación marginal a la agricultura afectarán el crecimiento económico de este mes, situándose por debajo del ritmo del 2% que venía mostrando la actividad económica.
Los sectores más afectados fueron el Transporte, la Construcción y los Servicios Financieros, así como el sector Minería, que sufrió el cierre temporal del Corredor Minero del Sur y la paralización de la mina de estaño Minsur en Puno.
La economía del Perú ha enfrentado varios desafíos durante el primer trimestre de 2023, incluyendo las protestas sociales, el bloqueo de carreteras y los fenómenos climáticos que han afectado el crecimiento económico del país.
Aunque se espera una recuperación gradual en los próximos meses, la proyección del PBI para el año 2023 tiene actualmente un sesgo a la baja, lo que refleja la incertidumbre en la economía del país.
Es importante seguir monitoreando los indicadores económicos y los eventos políticos y climáticos para evaluar su impacto en la economía y tomar medidas para mitigar los riesgos.