Las expectativas crediticias del primer trimestre de 2023 se han contraído con respecto a las de diciembre de 2022 en todos los segmentos empresariales. Según el Banco Central de Reserva (BCR), el financiamiento para la gran y mediana empresa se reducido en 1,9% y 1,4% respectivamente. Mientras que en el caso de la micro y pequeña empresa, el crédito bajó 0.7%.
El financiamiento tuvo un importante retroceso total de 2.1% interanual en enero, repercutiendo de manera significativa en los créditos del sector corporativo. Pues para la gran empresa decreció 0.1% y para la media empresa retrocedió 13.3%.
No quieren correr riesgos
La empresas no quieren tomar riesgos en este periodo, incluso, pese a los intentos del Estado por promover créditos para las mypes estos solo tuvieron un crecimiento del 6.5% interanual.
Para el especialista Luis Eduardo Falen de Intéligo SAB, el escenario nacional esta pasando por un debilitamiento económico con altas tasas de interés. El ejecutivo coincide con que esto evita que las empresas se arriesguen a asumir un caro compromiso económico de largo plazo. Y se señala que la incertidumbre de los próximos meses oscurece el panorama y evita que disminuyan las tasa de intereses.
El profesor de la Esan, Walter Leyva, señala por su parte que la inestabilidad social y polìtica de nuestro país provoca una menor demanda en el financiamiento y por ende la disminución de los créditos. Dijo que la falta de dinámica social afecta las proyecciones de las empresas, considerando que tal vez no puedan cumplir con las expectativas de ventas y por ende se difuculten sus pagos.