Una de las reacciones que tuvieron los inversionistas peruanos en la coyuntura local fue buscar llevar su capital a otros países, ya sea colocando su dinero en cuentas de ahorros, en fondos de inversiones o en propiedades.
Vicente Chávez, bróker de Remax Realty Group, trabaja en Lima y cuenta que son muchas las personas que desde abril empezaron a preguntar por propiedades en Estados Unidos. Al ser una empresa global, tiene la posibilidad de referir a un agente en sus oficinas en Florida.
“El mercado inmobiliario en Miami suele crecer entre un 1% o 3% anualmente, y desde el año pasado el crecimiento ha sido de 10%. El real state se ha potenciado en pandemia”, indica el experto.
El requerimiento de los clientes es por propiedades residenciales, y en menor medida por oficinas, locales comerciales y terrenos. Chávez cuenta que la afluencia de peruanos por el ´turismo de vacunas’ generó un abierto interés a la inversión inmobiliaria.
¿Coyuntura u optimismo?
La demanda en Miami se debe a las facilidades que ofrecen para el capital extranjero, ya sea compañías o personas, en tema de impuestos y también desde la banca.
De acuerdo al bróker, las propiedades que adquieren inversionistas peruanos usualmente se dan en alquiler, para recuperar la inversión y también sirve para utilizarse durante sus viajes de vacaciones. “Pero es una inversión, porque son personas que no tienen residencia en Estados Unidos”, aclara.
Inversión
Es importante indicar que en Estados Unidos existen diversos productos financieros que permiten que la operación se realice de manera ágil y transparente. Chávez detalló que para abrir una cuenta en el banco y para cerrar la operación inmobiliaria no se necesita viajar a Estados Unidos. Además, hay bancos que aceptan financiar desde el 70% pagando como 30% como inicial (down payment).
A través de Remax Realty Group, los peruanos pueden invertir en inmuebles en Estados Unidos con la garantía de una marca líder global en la industria inmobiliaria. Vicente Chávez, cuenta con una amplia cartera de proyectos con precios que van desde los US$ 140,000 y podrían superar el US$ 1 millón, según la zonificación, diseño y acabados.