El tráfico en Lima representa uno de los desafíos más estresantes para sus residentes. Por ello, una medida para contrarrestarlo es la implementación de la micromovilidad en áreas de alta congestión.
Según un informe presentado por Whoosh, una empresa de alquiler de scooters eléctricos, durante los primeros cuatro meses de operación en Lima, se registraron 27,500 usuarios, quienes realizaron más de 77,000 viajes, cubriendo una distancia total de 83 mil kilómetros.
Estos datos evidencian la disposición de los limeños a adoptar alternativas sostenibles, veloces y respetuosas con el medio ambiente para sus desplazamientos.
Es importante señalar que estos resultados provienen específicamente de tres distritos de Lima: Pueblo Libre, Magdalena del Mar y San Miguel. Sin embargo, se espera un aumento en estas cifras con la apertura de una nueva sede en Chorrillos, prevista para este año.
«Tenemos la expectativa de continuar expandiendo nuestro servicio a otros distritos, creando así un entramado interconectado para la micromovilidad, lo cual podría constituir una solución efectiva para el problema del tráfico en la ciudad», expresó Joao Pereira Reis, director regional para América Latina de Whoosh.
Expansión a más distritos
«La gran tarea para el 2024 es que las autoridades locales se abran a esta nueva alternativa para que los viajes interdistritales, que son la esencia del transporte, sean una realidad al 100%», agregó Pereira.
La implementación de esta red interconectada no solo ofrece ventajas en cuanto al transporte para los residentes y visitantes de los tres distritos mencionados, sino que también tiene un impacto significativo en términos de salud pública.
Durante los primeros cuatro meses de funcionamiento, Whoosh ha registrado un ahorro de más de 1,6 toneladas métricas de CO2, una contribución que, de expandirse a otras áreas de la capital, podría desempeñar un papel crucial en la reducción de la contaminación atmosférica y la mejora de la calidad del aire en la ciudad.