La Asociación de Contratistas Mineros del Perú (Acomipe) se pronunció frente a la situación generada por las manifestaciones en contra de los poderes del Estado. El descontento con el Ejecutivo y Legislativo y las protestas en contra de los mismos, han perjudicado a, por lo menos, 150 empresas contratistas. Según declaró Carlos Bernal, gerente general de la Acomipe, las organizaciones afectadas pertenecen a las distintas unidades mineras del país.
Por más de una semana continuaron estos levantamientos, como respuesta a la vacancia de Pedro Castillo y ascensión de Dina Boluarte al cargo de presidenta. Aunque se han logrado liberar algunas vías, las pérdidas que el bloqueo de carreteras causó, es grande. Durante varios días, se vio interrumpido el regular transporte de personas, productos, así como accesos a locales públicos y privados. Como ejemplo se puede tomar acceso a unidades mineras y el tránsito en el Corredor Minero del Sur.
“Considero que la afectación es enorme y reitero nuestra invocación a la integración del sector, por hacer algo que nos una en una tarea, un plan, un objetivo a largo plazo, pero que en algún momento nos dará la tranquilidad de desarrollar las actividades mineras del país», señaló Carlos Bernal.
Parálisis de nuevas inversiones
Carlos Bernal plantea que la inestabilidad política que atraviesa el Perú, aleja a la inversión minera. Mencionó que ve la cartera de inversiones prácticamente estancada. Y es que solo se está trabajando en proyectos antiguos o en ampliaciones de los mismos.
Plan de Comunicación
En tal sentido, Bernal recordó el plan Plan de Comunicación Itinerante que Acomipe presentó en el año 2017, frente al Ministerio de Energía y Minas. La propone como una solución para la situación del sector. La propuesta enfoca su atención en las zonas de influencia minera, e incluso donde aún no se inicia un proyecto.
Adelantándose a un futuro foco de conflicto, el plan contempla establecer comunicación con la población. Se les explicaría que en dicha ubicación se podría establecer una exploración, campamento, unidad o proyecto minero, por lo que se les informaría qué pueden esperar del mismo. Su fin, es manejar de manera trasparente el diálogo, para no crear falsas expectativas.
De tal manera, se deben articular las instituciones estatales junto a las organizaciones del sector minero para realizar un trabajo coordinado. Ello con el objetivo de que la ciudadanía comprenda, a cabalidad, como se desarrolla el sector y aclarar cualquier duda. A pesar de haber sido presentada en el 2017, hasta hoy no ha sido aplicada.