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L’Oréal estrena en Perú el «maquillaje virtual» a través de realidad aumentada

Esta tecnología ya se encuentra disponible en Perú en la web de la marca Maybelline New York y próximamente en el resto de marcas de su portafolio de maquillaje.
Por Almendra Ruesta
2 minutos

La empresa francesa L’Oréal revoluciona el mundo de los cosméticos apoyándose de la tecnología. Los productos que tradicionalmente eran probados sobre la piel ahora puedan ser testeados a distancia gracias a la realidad aumentada.

De esta forma, L’Oréal acelera la transformación digital de la industria de la belleza y pone a disposición de los consumidores peruanos la nueva opción de “maquillaje virtual”.

Fácil de usar

Para poder vivir esta experiencia, solo se necesita de un smartphone o una computadora con cámara web. Con estos dispositivos el cliente podrá probar diferentes productos de maquillaje y coloraciones para el cabello.

Esta tecnología ya se encuentra disponible en Perú en la web de la marca Maybelline New York y próximamente en el resto de marcas de su portafolio de maquillaje.

Esta nueva forma de probar los productos utilizando realidad aumentada, también llegará a los puntos de venta muy pronto.

Además, esta tecnología ayuda a democratizar el acceso a productos de gran calidad a través de canales de compra digitales.

Sostenibilidad y accesibilidad

Al respecto, Renato Abramovich, director general de L’Oréal Perú, señaló que: “La innovación está en el ADN de L’Oréal. Tenemos el propósito de liderar la transformación digital con tecnologías como la inteligencia artificial y la realidad aumentada, pero creemos que ser esto conlleva una gran responsabilidad y globalmente estamos adoptando el movimiento “Tech for Good”, trabajando en torno a cuatro dimensiones esenciales: sostenibilidad del comercio electrónico, privacidad de datos e inteligencia artificial responsable, accesibilidad en línea e inclusión, y el apoyo a las nuevas startups que se esfuerzan por crear tecnología para un impacto positivo”.

Este será un paso importante para adaptarse a una nueva forma de comprar, en la que el consumidor valora mucho los protocolos de seguridad y la calidad de los productos.