El Instituto Peruano de Economía (IPE), el Banco Mundial y el Instituto Cusqueño de Economía (INCUSE) presentaron este 4 de diciembre los resultados del evento “Revisión de las Finanzas Públicas para el Perú: Una mirada especial al Cusco”.
El análisis abordó la sostenibilidad fiscal nacional y la situación económica regional, marcada por retrasos en proyectos públicos y menores niveles de inversión.
Menor previsibilidad pese a indicadores sólidos
Antonio Cusato, economista del Banco Mundial, indicó que Perú mantiene un saldo de deuda pública equivalente al 32.4% del PBI y un riesgo país de 160 puntos básicos.
Sin embargo, el aumento del déficit fiscal y el incumplimiento de la regla fiscal en 2023 y 2024 redujeron la previsibilidad del marco fiscal.
El especialista señaló que, aunque las tasas del impuesto a la renta de personas (30.0%) y empresas (29.5%) son comparables a las de otros países, la recaudación efectiva es casi la mitad de la registrada en economías de ingresos altos.
También destacó que el uso de recursos es limitado: 45% de los proyectos públicos iniciados desde 2012 quedó en abandono a nivel nacional.
Desempeño económico del Cusco y sectores estratégicos
Carlos Gallardo, gerente general del IPE, explicó que el Cusco creció cerca de 10.0% anual entre 2004 y 2015, lo que redujo la pobreza a 17.6%. Entre 2015 y 2024, el crecimiento promedio bajó a 0.9%, y la pobreza subió a 18.5%.
El análisis identificó tres sectores clave:
Turismo
Las visitas a Machu Picchu se mantienen 24% por debajo de su tendencia prepandemia, lo que limita la recuperación del sector.
Minería
La región cuenta con tres proyectos mineros por US$ 3,300 millones, cuya puesta en marcha permitiría duplicar la producción anual actual de cobre y superar las 525,000 toneladas.
Agro
Se requieren avances en diversificación exportadora y fortalecimiento de capacidades productivas.
Más de 3,000 obras detenidas en Cusco
Gallardo informó que el Cusco recibió casi S/ 13,000 millones en transferencias por canon y regalías desde 2021. Sin embargo, persisten brechas en gestión: más de 3,000 proyectos públicos regionales y locales están paralizados o abandonados, según cifras del Banco Mundial.
El IPE estima que, bajo este escenario, el PBI regional podría caer alrededor de 7% en 2025.
Infraestructura, gas natural y barreras para nuevas inversiones
Fernando Santoyo, presidente de la Cámara de Comercio del Cusco, señaló la importancia de avanzar en proyectos mineros y de infraestructura como carreteras, servicios de agua y saneamiento, y el aeropuerto regional. También destacó la necesidad de ampliar el uso del gas natural.
Roger Valencia, presidente del INCUSE, indicó que los proyectos hoteleros enfrentan procesos administrativos más complejos que las obras públicas, lo que coincide con la elevada cantidad de iniciativas paralizadas. Asimismo, identificó oportunidades en agroindustria, especialmente en flores y fresas.