El rostro de una vaca floreciendo en una flor roja intensa se puede observar justo debajo del nombre más reconocido en la mesa de todos los peruanos: Gloria, la marca peruana líder en el mercado lácteo. Mermeladas, mantequillas, quesos, yogurts y su famosísima leche son algunos de los productos que deleitan los paladares del país andino.
Gloria S. A. es una empresa peruana con una rica historia empresarial que se remonta a más de 80 años. La compañía fue fundada en 1941 como una pequeña fábrica de tejidos en la ciudad de Arequipa, en el sur del Perú.
En la década de 1950 comenzó a incursionar en el sector lácteo, adquiriendo la marca Gloria en 1959. En los años siguientes, el Grupo Gloria amplió su alcance y comenzó a diversificarse en una variedad de sectores empresariales, incluyendo alimentos, bebidas, cemento y energía.
En 1983, la compañía adquirió una importante participación en la empresa láctea peruana Laive, lo que le permitió consolidarse en el mercado de lácteos y convertirse en uno de los principales actores del sector.
En las décadas siguientes, el Gloria continuó expandiéndose y diversificándose, tanto en Perú como en el extranjero. En la actualidad, la empresa tiene presencia en varios países de América Latina y opera en una amplia variedad de sectores.
La leche Gloria se caracteriza por la producción de altísima calidad de leches industrializadas, fabricando y comercializando derivados lácteos, así como una gran variedad de otros productos de consumo masivo.
A mayo del 2021, cuenta con una participación en el mercado local de 77.5% en leches industrializadas, y de 80.3% en leche evaporada, comercializadas a través de diversas marcas y presentaciones.
Controversias
A lo largo de su historia, el Gloria también ha sido objeto de controversias. En los últimos años, fue acusado de una serie de irregularidades, incluyendo la destrucción de bosques en la Amazonía peruana para la expansión de sus plantaciones de palma aceitera, así como la violación de los derechos laborales de sus trabajadores en sus plantas de procesamiento de leche.
Además, en 2017, se hizo público un caso de corrupción en el que la empresa habría sobornado a funcionarios públicos para obtener permisos y licencias de operación en el famoso caso «leche que no es leche».
Esto salió a la luz debido a que la Autoridad Panameña de Seguridad de Alimentos suspendió la importación y comercialización de la leche evaporada Pura Vida, debido a que consideró que el producto no puede ser etiquetado como “lácteo” ni ser comercializado como leche. Pura Vida es la marca denominada ‘de bajo costo’ que comercializa Gloria desde los 2000.
Defendiendo su producto, el Grupo Gloria, afirmó que Pura Vida sí es leche en un 60% de su composición y que el resto son ingredientes “con beneficios nutricionales”. El final del caso implicó que se tuviera que rediseñar el etiquetado y señalar con exactitud las proporciones y los valores de la marca, además de haber quitado a la icónica vaca del mismo.
Resiliencia
A pesar de estas controversias, Gloria S. A. sigue siendo una de las empresas más importantes y reconocidas de Perú, y ha desempeñado un papel clave en el desarrollo económico y empresarial del país.
Hoy, gracias a una inversión de US$ 30 millones, se cuenta con la primera línea aséptica para la elaboración de productos lácteos que no necesitan refrigeración: Yofresh, Pro y Shake. Con estos lanzamientos, Gloria busca atender la demanda de productos diseñados a las necesidades de los consumidores, con la mejor calidad y nutrición.
En los últimos años, Gloria, la empresa líder en el mercado lácteo en el Perú, viene ampliando constantemente su cartera de productos con el afán de satisfacer mejor a sus consumidores. Es así que a la fecha cuenta con las marcas Gloria, Bonlé, Pura Vida, Bella Holandesa, Mónaco, Chicolac, Yomost, Yogurello y La Mesa.
La historia del gigante de la leche es un ejemplo de perseverancia y adaptación a los cambios en el entorno empresarial.