En su última parada por el Golfo Pérsico, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció un acuerdo clave con Emiratos Árabes Unidos (EAU) que permitirá a este país adquirir semiconductores avanzados para inteligencia artificial desarrollados por empresas estadounidenses.
La noticia marca un avance importante para Abu Dabi, que busca consolidarse como un hub global de innovación tecnológica y, en particular, en el desarrollo de capacidades en inteligencia artificial. Esta iniciativa representa también una victoria estratégica para Washington, que asegura la participación de uno de los mayores productores de energía del mundo en su ecosistema tecnológico.
El anuncio fue parte del cierre de una gira exprés de Trump por Arabia Saudita, Qatar y Emiratos Árabes Unidos, donde se promovieron acuerdos económicos de gran escala. En ese contexto, la petrolera estatal de Abu Dabi confirmó su intención de elevar el valor de sus inversiones en el mercado energético estadounidense a US$ 440,000 millones en los próximos diez años.
Una alianza de largo plazo en sectores estratégicos
Ya en marzo, durante reuniones bilaterales entre altos funcionarios de Emiratos Árabes Unidos y Donald Trump, se había revelado un compromiso de inversión de US$ 1.4 billones en Estados Unidos, a ser ejecutado en una década.
Esta hoja de ruta contempla sectores como inteligencia artificial, energía y manufactura, con el objetivo de profundizar los vínculos económicos y tecnológicos entre ambas naciones.
La posibilidad de adquirir chips avanzados —clave para el desarrollo de modelos de IA generativa y sistemas de automatización— refuerza la estrategia de Abu Dabi por diversificar su economía y acelerar su transformación digital.