China y Estados Unidos están atravesando por fuertes tensiones. El presidente estadounidense, Donald Trump, escribió en su cuenta de Twitter que su país mantiene una opción política, bajo diversas condiciones, para cortar todos los puentes con China”.
A esto, el mandatario, dijo responder así a declaraciones de su representante de Comercio (USTR), Robert Lighthizer, quien encabeza las negociaciones comerciales con Beijing.
Lighthizer dijo que China estaba cumpliendo los términos de un acuerdo que alivió la disputa y que ahora era imposible “desacoplar” a los dos gigantes económicos. “Esa era una opción política hace años, pero no creo que sea una opción política razonable en este momento”, agregó.
El representante de Comercio se describe como un defensor de una política intransigente con Pekín y ha sido el principal impulsor de los planes de la administración para reformar la Organización Mundial del Comercio.
Esto con el fin de que esta controle mejor las decisiones de China que, según él, incumplen las reglas de libre comercio.
Pero su admisión de que los vínculos económicos con China son inextricables, a pesar de la dura campaña de Trump para que empresas estadounidenses relocalicen su producción en el país norteamericano, enojó a miembros del Partido Republicano.
El presidente intentó quitarle importancia a las declaraciones del representante comercial. “No fue culpa del embajador Lighthizer (ayer en el comité), tal vez yo no fui bastante claro”, declaró.