La caída del dólar en Perú 2025 continúa, cerrando el miércoles 26 de febrero de 2025 en S/3.67, según el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). Hoy, jueves 27 de febrero de 2025, abrió en S/3.65, fortaleciendo el sol. Sin embargo, podría revertirse en 2026 por incertidumbre preelectoral.
Caída del dólar en Perú 2025: Factores clave
El descenso del dólar en Perú 2025 se explica por cuatro factores, según Pablo Leno Montero de Renta4 Perú. Primero, los aranceles de Donald Trump afectan mercados globales. Segundo, la paz entre Rusia y Ucrania reduce tensiones. Tercero, el sector minero crece por precios altos de metales. Cuarto, empresas venden dólares para pagar impuestos.
Marzo inicia la temporada de impuestos, aumentando la oferta de dólares. Por ello, el tipo de cambio podría bajar a S/3.64. Incluso, podría fluctuar entre S/3.60 y S/3.62 si coincide con pagos de renta, según Montero.
Oportunidades y riesgos
La caída del dólar en Perú 2025 ofrece oportunidades para quienes necesitan dólares. Por ejemplo, decisiones estratégicas podrían tomarse en marzo, con alta oferta de divisas. Sin embargo, en un año preelectoral, una baja abrupta es poco probable.
Jonathan Torres, analista de Capitaria, señaló que esta dinámica supera proyecciones iniciales para 2025. Aunque el sol se fortalece, la volatilidad podría aumentar hacia 2026, cuando elecciones presidenciales eleven la incertidumbre. Así, inversores podrían refugiarse en dólares.
Perspectiva futura
El retroceso del dólar en Perú 2025 refleja estabilidad económica local, pero no es permanente. La temporada de impuestos en marzo presiona el tipo de cambio a la baja. Sin embargo, el panorama preelectoral en 2026 podría revertir esta tendencia.
La oferta de dólares por empresas mineras y corporativas estabiliza el sol. No obstante, la incertidumbre política podría elevar el dólar a niveles más altos en 2026, afectando el mercado cambiario.
La baja del dólar en Perú 2025 beneficia a quienes buscan divisas ahora. Sin embargo, el descenso del dólar en Perú 2025 podría frenarse por volatilidad preelectoral. Por ello, el BCRP monitorea factores globales y locales para mantener estabilidad.