El pasado sábado, la fiscalía de la nación acudió a la residencia de la presidenta Dina Boluarte en cumplimiento de una orden fiscal relacionada con la investigación del «caso Rolex». En este operativo participó la División de Delitos de Alta Complejidad (Diviac) de la Policía Nacional del Perú (PNP).
Debido al incumplimiento de la orden de permitir el ingreso a los agentes de la ley, estos se vieron obligados a utilizar un ariete para romper la puerta y proceder a ingresar al domicilio de la mandataria.
¿Qué pistas de los relojes se encontró en casa de la presidenta?
Los informes policiales revelaron la presencia de un estuche sobre una mesa de madera, dentro del cual se encontraba una colección de relojes, según se detalla:
- Reloj metálico color dorado y negro, con la inscripción “bebe”.
- Reloj metálico de color dorado rosa, el cual en la parte central contiene la inscripción “BULOVA”.
- Reloj metálico color dorado, el cual en la parte central contiene la inscripción “FOSSIL”.
- Reloj metálico de color dorado, el cual contiene la inscripción “MICHAEL KORS”.
- Otro reloj metálico de color dorado con la parte central de color rosado claro, con la inscripción “FOSSIL”.
- Reloj con correas de color marrón con la parte central metálica de color dorado, con la inscripción “SWAROVSKI”.
- Reloj metálico color dorado con la parte central de color negro con la inscripción “QUARTZ”.
- Reloj metálico color dorado rosa con la parte central de color blanco con la inscripción “TIMEPICE».
¿Qué comentarios hizo la presidenta?
Tanto la Policía Nacional como el equipo de fiscales se dirigieron también al Palacio de Gobierno con la misión de llegar hasta la residencia presidencial y el despacho de la presidenta.
En el lugar, ya se encontraban esperando la llegada del fiscal y la policía la presidenta Boluarte, el premier Gustavo Adianzén, el canciller Gonzales Olaechea, el ministro de Justicia Eduardo Arana y el ministro de Desarrollo e Inclusión Social Julio Demartini.
Todos los presentes fueron sometidos a una revisión conforme a la ley. Ante esta situación, el fiscal solicitó a la presidenta que entregara los relojes. Esta solo atinó a responder que «no era un proceso de exhibición sino un allanamiento».
«El Fiscal procedió a informarle a la investigada la finalidad del allanamiento y la invitó a entregar enseres relacionados a la presente investigación, obteniendo como respuesta que no se trataba de una diligencia de exhibición; asimismo se procedió a realizar el respectivo registro personal a la investigada», se remarca en el acta de la policía.