Cada 30 de marzo se conmemora el Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, una fecha que reconoce la importancia de la labor que hacen en todo el mundo.
Sin embargo, el Perú aún está muy lejos de darles un trato de calidad, en términos de formalización y cumplimiento de las leyes.
Según los datos de la Encuesta Nacional de Hogares sobre Condiciones de Vida y Pobreza (ENAHO), más de 360,000 personas se dedican al trabajo del hogar remunerado en Perú, de las cuales el 96% mujeres y el 92% se encuentra en la informalidad, superando en casi 20 puntos porcentuales el promedio nacional.
Por otro lado, con respecto al acceso a los sistemas de pensiones, el 82% de las personas trabajadoras del hogar no se encuentran afiliados, una proporción más alta que el promedio de la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada nacional, que es del 63%.
Asimismo, cabe recalcar que los seguros de salud tienen niveles de acceso similares al promedio de la PEA ocupada nacional.
Barre con informalidad
En este contexto, OIT presenta la campaña “Barre con la Informalidad” para crear conciencia y cerrar las brechas de formalización y de trabajo decente que tienen las personas trabajadoras del hogar en el Perú.
El Proyecto es “Abriendo Puertas: Más y mejores oportunidades de trabajo decente para las trabajadoras del hogar en el Perú” que ejecuta la OIT en colaboración con el gobierno de Canadá, es que se lanza la campaña «Barre con la informalidad«.
La finalidad de este proyecto es luchar contra la discriminación y promover la formalización del trabajo y respeto de los derechos de las trabajadoras del hogar.
Esta iniciativa ha sido creada en colaboración con las federaciones nacionales de trabajadoras del hogar FENTTRAHOP y FENTRAHOGARP, el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, y el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE).