La empresa Glencore, que opera la mina Antapaccay, denunció que un grupo de vándalos ingresó al campamento de Cusco y quemó dos autos, pese a que algunos trabajadores se encontraban descansando en la zona. La empresa condenó los actos, los cuales calificó «repudiables y delincuenciales».
“Nuestra empresa es respetuosa del derecho a la protesta, sin embargo, de ninguna manera comparte estos actos repudiables y delincuenciales que ponen en riesgo la integridad de nuestros trabajadores y de la población civil en general”, señaló Glencore en un comunicado oficial.
De acuerdo a la versión de la minera, los hechos ocurrieron al promediar las 12:30 del mediodía en las inmediaciones del campamento de la mina Antapaccay, mina de cobre que opera en la provincia de Espinar, en la región Cusco.
Desde el 4 de enero se vienen registrando manifestaciones en el sur del país, siendo el centro de las protestas Puno y Cusco. En la ciudad imperial, distintas bases provinciales vienen acatando el paro macroregional en contra del gobierno de Dina Boluarte.
Producto de los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes, 11 personas permanecen detenidas en diferentes comisarías de Cusco. Si bien en esta región las protestas vienen desarrollando de manera pacífica, Chumbivilcas es la excepción. La noche del miércoles 11 de enero, violentos manifestantes quemaron un bus que empleado para transportar a miembros de la policía.
DATO: La compañía minera Antapaccay es el legado de la mina Tintaya y forma parte del Grupo Glencore. Inició sus operaciones productivas y extractivas de cobre en el año 2012