Las acciones de Mercedes-Benz Group AG experimentaron su mayor descenso en cuatro años debido a una desaceleración significativa en China. Esta situación llevó al fabricante de automóviles de lujo a ajustar sus expectativas financieras.
Este viernes, las acciones de la compañía lideraron las pérdidas en el DAX 40, cayendo un 7.08% a 54,83 euros a las 8:30 horas GMT. La empresa comunicó que había reducido sus proyecciones financieras para 2024 debido a “el mayor deterioro del entorno macroeconómico, principalmente en China”.
La reducción en las previsiones se debe al impacto negativo en el volumen de ventas en el país, especialmente en el segmento de gama alta. Como resultado, Mercedes-Benz espera que las ventas del segundo semestre se mantengan sin cambios respecto al primero, siendo más débil de lo anticipado.
Además, el cierre del ejercicio se verá afectado por ajustes de valoración y un entorno de precios dinámicos. La compañía anticipa que el beneficio antes de intereses e impuestos (EBIT) “esté significativamente por debajo del año anterior”, en comparación con su previsión anterior.
Caja libre
El flujo de caja libre también se espera que esté notable por debajo del nivel del año anterior, cuando la expectativa era que fuera ligeramente inferior. Para Mercedes-Benz Cars, la rentabilidad sobre ventas ajustada se proyecta entre el 7.5% y el 8.5%, en contraste con la estimación anterior de entre el 10% y el 11%.
Esto implica una previsión de alrededor del 6% para el segundo semestre del año. En cuanto a su división de furgonetas (Mercedes-Benz Vans) y su área de movilidad (Mercedes-Benz Mobility), la compañía mantuvo sus previsiones anteriores.
Se espera que la rentabilidad sobre ventas ajustadas para Mercedes-Benz Vans se sitúe entre el 14% y el 15%. Para Mercedes-Benz Mobility, la proyección es que está entre el 8.5% y el 9.5%.
Situación en China
Las ventas de los modelos más caros de Mercedes, como los sedanes S-Class y Maybach, han sufrido un impacto significativo debido a la caída en China. El fabricante ha ajustado sus expectativas para su unidad principal de automóviles, pronosticando rendimientos ajustados entre el 7,5% y el 8,5%, en lugar del 11% anterior.
Las ganancias antes de intereses e impuestos estarán “significativamente por debajo” del nivel del año pasado. Ola Källenius, director ejecutivo de Mercedes, anunció planes para una ofensiva de ventas en China con nuevos productos durante una llamada con analistas.
Esta advertencia representa un obstáculo para el avance de Mercedes hacia un mercado más cómodo y es una señal preocupante para la industria automotriz alemana. La industria enfrenta una transición complicada hacia los autos eléctricos y desafíos en el mercado chino.
Volkswagen AG también se enfrenta a dificultades, ya que desechó un antiguo pacto laboral y podría cerrar fábricas en Alemania por primera vez debido a la baja demanda. Además, BMW redujo su previsión de ganancias para el año, afectada por la recesión en China y las lentas ventas de vehículos eléctricos.
Las ventas disminuyen
Los recortes en las expectativas agotan la estrategia de Mercedes de aumentar la rentabilidad vendiendo más vehículos lujosos. La compañía indicó que el entorno macroeconómico en China se ha deteriorado aún más, impulsado por la caída persistente del sector inmobiliario.
Los últimos modelos eléctricos de Mercedes han tenido una recepción tibia entre los consumidores en Asia y otras regiones. Los conductores jóvenes en China están optando cada vez más por marcas locales que se consideran más avanzadas tecnológicamente.
Mientras las ventas en China disminuyen, las entregas en Europa también enfrentan presión. En agosto, las entregas de Mercedes en Europa cayeron un 13% y han disminuido un 3% durante los primeros ocho meses del año.
La caída de las ventas de vehículos eléctricos complicará el cumplimiento de las normas de emisiones más estrictas de la Unión Europea que entrarán en vigor el próximo año. Esto exponen a la industria automotriz a posibles multas que podrían ascender a millas de millones de euros. El ministro de Economía, Robert Habeck, organizará una cumbre industrial el lunes en Berlín para discutir soluciones a la crisis actual.