Un choque de trenes ocurrido en la ruta ferroviaria que conecta Ollantaytambo con Machu Picchu alteró la operación turística en Cusco durante los últimos días del año.
El accidente dejó un fallecido y cerca de un centenar de heridos, además de generar retrasos prolongados, pasajeros varados y dificultades logísticas en uno de los principales corredores turísticos del país.
Zona y características del accidente ferroviario
De acuerdo con información proporcionada por el presidente de la Cámara de Comercio de Cusco, Fernando Santoyo, el accidente se produjo el martes 30 de diciembre de 2025 en la ruta ferroviaria entre Ollantaytambo y Machu Picchu. El punto exacto se ubica a unos 10 kilómetros de la estación de Ollantaytambo, aproximadamente en el primer tercio del trayecto hacia el Santuario.
La zona se caracteriza por ser angosta, rocosa y con curvas cerradas que limitan la visibilidad de los operadores. Según las primeras versiones, el evento habría sido un choque frontal entre dos trenes, aunque también se evalúa la hipótesis de un impacto por alcance, luego de que una de las unidades se detuviera en la vía.
Santoyo precisó que, al momento del accidente, no se registraban condiciones de neblina. La velocidad máxima permitida en ese tramo es de alrededor de 40 km/h, lo que contribuyó a reducir la magnitud de los daños frente a otros accidentes ferroviarios de mayor velocidad.
Empresas involucradas y gestión de la vía
En el accidente participaron trenes operados por Inkarail y Perurail, ambas empresas dedicadas principalmente al transporte turístico. El tren de Inkarail resultó con mayores daños, mientras que la unidad de Perurail presentó afectaciones menores.
La infraestructura ferroviaria es administrada por Ferrocarril Transandino S.A. (FETRANSA), concesionaria desde 1999 y responsable de la programación de horarios, frecuencias y cruces en una vía que cuenta con tramos de doble riel. Según la Cámara de Comercio de Cusco, este es el primer accidente de esta magnitud registrado bajo dicha concesión.
Impacto en turistas y actividad económica
El choque de trenes en Cusco provocó que cerca de 500 turistas quedaran varados en Machu Picchu durante varias horas. El servicio ferroviario se restableció alrededor de las 2:00 a.m. del día siguiente, permitiendo el retorno progresivo de los pasajeros hacia Cusco.
Cada uno de los casi 100 turistas directamente afectados por el accidente habría gastado más de S/700 adicionales durante la espera, entre alojamiento, alimentación y otros servicios, de acuerdo con estimaciones de la Cámara de Comercio de Cusco. La devolución de estos gastos, así como de boletos no utilizados, podría demorar varios meses.
Para los días 29, 30 y 31 de diciembre, el sector turismo proyectaba ingresos cercanos a S/25 millones adicionales para la economía local. En promedio, Cusco genera entre S/70 millones y S/80 millones mensuales en temporada baja, mientras que en temporada alta la cifra puede alcanzar hasta S/220 millones.
Para las celebraciones de fin de año se esperaba la llegada de aproximadamente 50.000 visitantes a la región, de los cuales unos 5.000 tenían como destino Machu Picchu, de acuerdo con la capacidad operativa del Santuario.
Costos para los visitantes
Según la Cámara de Comercio de Cusco, el precio promedio del boleto de ingreso a Machu Picchu para turistas extranjeros es de S/165. El pasaje en tren tiene un costo cercano a US$60, equivalente a más de S/750, considerando el transporte ferroviario y el acceso al Santuario, aunque el monto varía según el tipo de servicio.
Estos costos representan un gasto significativo para los visitantes que no pudieron completar su itinerario el día del choque de trenes Cusco.
Reprogramaciones y devoluciones de entradas
Tras el restablecimiento de la vía ferroviaria, las empresas operadoras reprogramaron los viajes de los pasajeros afectados. Para la mañana del día siguiente al accidente, se preveía que la totalidad de turistas varados pudiera retornar a Cusco.
El Ministerio de Cultura, entidad encargada de la administración del ingreso a Machu Picchu, habilitó opciones para la reprogramación de entradas. La devolución del dinero también es posible, aunque el procedimiento es descrito como prolongado y con alta carga administrativa, lo que lleva a la mayoría de visitantes a optar por la reprogramación.
Propuesta de una autoridad autónoma para Machu Picchu
A raíz del accidente, la Cámara de Comercio de Cusco planteó la creación de una Autoridad Autónoma Nacional para Machu Picchu, adscrita al Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MINCETUR). El objetivo sería mejorar la coordinación y la gestión del Santuario, especialmente ante situaciones de emergencia.
La propuesta difiere de la posición del Gobierno Regional del Cusco, que plantea una autoridad única para todo el Valle Sagrado. La Cámara sostiene que Machu Picchu, por su relevancia internacional y compromisos con la Unesco, requiere una entidad autónoma de alcance nacional.