Pescado fresco, limón, cebolla, culantro, sal, ají, zarandaja, camote y choclo son los ingredientes del ceviche piurano que Bruno Torchiani, ‘Chavo’ para los amigos, brinda en Bucanieri, restaurante que abrió hace diez años en Barranco, Lima, y hoy le hace frente a la pandemia del COVID-19 implementando su servicio delivery para mantenerse a flote.
Bruno creció en la Unidad Vecinal en Piura, estudió Administración y Gastronomía y encontró en Bucanieri la forma de combinar ambas carreras para emprender el negocio propio, el mismo que, según refiere, “ha llegado a ser lo que es gracias a sus clientes”.
Hace diez años, entre el 2009 y 2010, Bruno tenía un snack bar en Máncora, ’Mau-loa’, que en lenguaje hawaiano significa “para siempre”; sin embargo, gracias su hermano Dino Torchiani dejó todo para emprender un viaje a Lima y empezar de cero con una idea de negocio clara: Ofrecer un buen ceviche de noche.
¿Cómo nace Bucanieri?
“La idea nace de mi hermano Dino, él ya vivía en Lima y me dijo que aquí no había un buen lugar en donde ir a comer un buen ceviche y menos de noche. Me gustó el proyecto: poder comer ceviche de noche y ofrecerlo más que todo a nuestros amigos piuranos”, relata ‘Chavo’.
Como la mayoría de emprendedores provincianos que llegan a la capital, hay que empezar desde abajo para surgir. “Mi ingreso a Lima fue con mucho sacrificio, llegué sin nada, mi hermano me apoyó y viví en Lince y luego en la casa de unos amigos en San Borja. Todo fue sacrificio desde el principio para darle todo a Bucanieri. Arrancamos con un aproximado de 15 mil soles y abrimos en Barranco, el local fue un traspaso de una pizzería que fuimos adaptando”.
Ingresar a Bucanieri es sumergirse en una temática pirata, un restobar pirata, tal como indica Bruno. Barcos, calaveras, banderas, camisetas de fútbol en las paredes y mesas de madera se complementan para darle ese toque bucanero, tal como su nombre refiere. “Bucanieri es la combinación de la palabra bucanero con la terminación –eri, que en italiano se usa para formar el plural, por lo tanto, sería ‘bucaneros’ en italiano, y quise que exista esa mezcla porque mi abuelo vino de Italia y se instaló en La Punta, Callao”.
¿Qué diferencia a Bucanieri de su competencia?
“Aparte de tener un ceviche de noche, que no es algo muy común de encontrar en Lima, el ambiente es único porque hay gente que llega y se da con la sorpresa de que acá se topan con gente que no veían en años, amigos de su promoción de colegio o de la universidad o del trabajo y se hace un ambiente completamente distinto. Aquí no es que llegas a un local y todos son completamente desconocidos, tú llegas a Bucanieri y por a o b motivos te cruzas con el amigo, el primo, tío o cuñado, pero llegas a encontrarte con alguien conocido y esa química no la he visto en muchos restobares”, explica el gerente del negocio.
¿Qué productos ofrecen?
“En Bucanieri ofrecemos ceviches y platos a base de pescados y mariscos como tiraditos y chicharrón, tenemos también algunos platos piuranos representativos como majado de yuca o seco de chavelo, ya que nos los piden en el trayecto del tiempo”, destaca Bruno.
Para Torchiani, el sueño de su empresa es que todo el Perú tenga la posibilidad de comer ceviche de noche: “Bucanieri quiere ser parte de ese sueño y estar en varias partes del Perú y acostumbrarnos a comer un buen ceviche de día y que no sea sorpresa comerlo de noche. Eso no lo he visto en Tacna, ni en Cusco, ni en Trujillo”.
¿Cómo es el cliente de Bucanieri?
Como en todo negocio de comida, el cliente es lo principal para que un emprendimiento crezca y no muera en el intento, y en Bucanieri, el comensal aporta con recomendaciones y sugerencias tanto de lo que consume como del ambiente y lo que podría mejorarse, y Bruno siempre está atento a ello.
“En general es un cliente muy bueno, aporta mucho al ambiente. Son en mayoría piuranos y por eso es muy complicado que le puedas ofrecer un pescado congelado y no uno fresco porque han nacido con el ceviche en las venas. El mismo piurano se da cuenta cuando es un ceviche piurano o uno limeño, por ejemplo, si le echan ajo marcan un distanciamiento. El ceviche de Bucanieri es simple: lleva sal, limón, culantro, cebolla, ají limo picado, lo acompañamos de zarandaja, canchita, camote, choclo y yuca”, apunta.
¿Apuntas a llegar a otro segmento?
“Sí, el reto de Bucanieri es que en todo el Perú tengamos la costumbre de comer ceviche de noche, tener una ‘raza cevichera’ y que esa costumbre que empezó en Piura se extienda a todo el territorio”