Bank of America advierte que «cualquier cosa puede pasar». La institución no ve con buenos ojos el gobierno de Manuel Merino de Lama, quien asumió el poder tras la destitución del presidente Martín Vizcarra.
La entidad financiera apuntó que el nuevo presidente interno del Perú, Manuel Merino, «tiene inclinaciones populistas«.
Esto, debido a su apoyo a proyectos como el retiro de fondos de pensiones, a la ley de congelamiento de deudas, la suspensión del pago de los peajes y otras iniciativas.
“Merino, su eventual gabinete interino y el Congreso tendrán una ventana de nueve meses hasta las elecciones para aprobar e implementar medidas populistas”, añadió.
Esta sería la peor crisis que sufre el Perú desde que Alberto Fujimori huyó a Japón en el año 2000, indicó el banco.
Añadió que este evento tendrá graves consecuencias para la estabilidad económica y política del país.
La corporación indicó que la única acción del nuevo gobierno que podría aliviar la incertidumbre sería un adelanto de elecciones generales.
Esta decisión reduciría el tiempo que tendría esta administración para aprobar leyes que perjudiquen la economía.
Sobre las consecuencias para las finanzas del Perú, el banco prevé que la primera víctima sea la divisa nacional, considerando la tasa de interés de referencia baja que maneja el Banco Central de Reserva del Perú (BCR).
Bank of America subrayó que espera que el BCR intensifique una intervención en el mercado cambiario. De esta forma, se prevendría un movimiento agudo en la divisa local.
La entidad también intuye una mayor presión para los bonos soberanos del país, ante una eventual ley que permita un mayor retiro de los fondos previsionales.