Nueve meses después de lanzar Apple Pay Later en Estados Unidos, Apple decidió cerrar este servicio de préstamos, el cual ofrecía entre $50 y $1,000 a sus clientes.
La decisión de la empresa responde a las altas tasas de interés. Actualmente, dichas tasas se encuentran en niveles históricos del 5.5% en Estados Unidos, así como a las complejidades regulatorias de mantener un servicio financiero propio.
Estos factores han hecho que, para la empresa tecnológica, conceder préstamos, no sea tan rentable como se esperaba.
Empresas terceras a cargo
A partir de ahora, la concesión de préstamos será gestionada por empresas como Affirm Holdings y el banco Citigroup. Estas se integrarán en la próxima actualización de software iOS 18.
La actualización de Apple Pay incluirá nuevas funciones para pagar a plazos, pero los préstamos serán ofrecidos por terceros.
En diferentes países, estos servicios serán proporcionados por distintos bancos:
- En Australia, el banco ANZ.
- En el Reino Unido, HSBC y Monzo.
- En Estados Unidos, Citibank y otros bancos.
- Por último, en España, Caixa Bank.
La Estrategia fintech de Apple
Apple Pay Later era parte de un conjunto de nuevos servicios que Apple introdujo con iOS 16, lo que intentó era ingresar al sector fintech, es decir, al sector de las tecnologías financiaras y centrarse en el desarrollo de software.
El servicio se sumaba a otros productos financieros de Apple, como Apple Pay, lanzado en 2014, y la Apple Card, anunciada en 2019. Sin embargo, Apple decidió no asumir la carga de gestionar estos préstamos por sí misma.
«A partir de finales de este año, los usuarios de todo el mundo podrán acceder a préstamos a plazos ofrecidos a través de tarjetas de crédito y débito, así como prestamistas, al realizar el pago con Apple Pay», dijo un portavoz de Apple a la CNBC.
Competencia para el sector financiero
Apple, una de las empresas más grandes del mundo, amplió su influencia en sectores que antes parecían fuera de su alcance.
Ana Botín, presidenta del Banco Santander, mencionó hace unos meses en el Congreso de la Empresa Familiar que el mayor reto para los bancos es transformarse para competir con grandes plataformas tecnológicas como Apple. «Nuestro mayor competidor va a ser Apple», declaró en una entrevista.