Petroperú no la pasa nada bien. A su falta de liquidez ahora se suma la pérdida que registró durante el último trimestre del presente año. Durante julio y septiembre, la estatal perdió 60,9 millones de dólares, debido principalmente al alto costo de los combustibles y fletes tras el inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania.
Esta cifra es un 63% superior a la que registró durante el mismo periodo en el 2021, donde las perdidas sumaron 38.3 millones de dólares. En aquella ocasión los números en rojo se debieron a una reducción de su utilidad bruta.
De acuerdo al reporte de Petroperú, las causas detrás de este reporte negativo recaen en los altos precios internacionales de los combustibles, mayores precios en el transporte y costos totales de adquisición. Al mes requiere para cubrir la demanda nacional diez buques de diésel, tres de gasolinas y dos de GLP y turbo (para aviación).
«El alza del precio internacional del crudo en este año 2022, derivado principalmente del conflicto entre Rusia y Ucrania, trae como consecuencia el alza en los servicios de transporte (fletes y vinculados), lo que eleva aún más los costos», indica la petrolera en su informe.
La empresa estatal viene atravesando una situación económica sin precedentes. Luego de obtener baja calificación crediticia por las empresas de riesgo S&P Ratings y Fitch Ratings: de ‘BBB-‘ a ‘BB+’, o más conocido como «bonos basura«, el acceso a líneas de crédito se le cerraron.
Petroperú se prepara para asumir los costos de inicio de producción y estabilización de la nueva refinería de Talara, lo que demandará una millonaria cantidad de dinero, con la que no cuenta en este momento, por lo que se espera una nueva inyección del Ejecutivo.
