Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el Producto Bruto Interno (PBI) experimentó un crecimiento de 3.4% en el mes de junio, registrando una aceleración de 2.5% respecto a lo mostrado en el mes de mayo.
De este modo, con el resultado de junio, el PBI acumuló una expansión de 3.3% durante el segundo trimestre y de 3.5% en lo que respecta al acumulado del primer semestre.
Cabe señalar que el resultado superó el 2.6% proyectado por el consenso de analistas, y además estuvo muy cerca del 3.5% que estimó el Banco Central de Reserva (BCR).
La gran evolución del mes de junio estuvo justificada por la recuperación de la producción minera, esto debido a que a mediados de junio se retomaron las operaciones de la mina de cobre Las Bambas tras dejar atrás, de manera temporal, las protestas sociales, además, también influyó la aceleración del sector Construcción, que se vio impulsado por la reactivación de la inversión pública.
Proyección
Scotiabank Research estima una desaceleración de la actividad económica para el tercer trimestre, a un nivel situado por debajo de 3%.
La desaceleración está justificada por un menor efecto estadístico positivo, producto del desvanecimiento de la base de comparación favorable postconfinamiento, y la caída prevista de la inversión privada, la cual se condice con el deterioro de la confianza empresarial vinculada al ruido político.
Sin embargo, el departamento de estudios económicos de la entidad bancaria, proyectan que el consumo privado se mantendrá relativamente robusto debido a la recuperación del empleo formal y el acceso a los retiros extraordinarios de los fondos de pensiones.
Por último, en Scotiabank Research argumentan que el volumen de los envíos internacionales se aceleraría a finales del tercer trimestre, en la medida que se inicien las operaciones del proyecto de cobre Quellaveco.
